miércoles, 25 de junio de 2014

CRONICA DEL PASOTISMO MUNICIPAL(IV)

Como los postes siguen sin retirarse, la Comunidad de Propietarios se dirige al Sindic de Greugues en Mayo de 2014 solicitando inste al Ayuntamiento de Alicante a atender la petición.




lunes, 23 de junio de 2014

CRONICA DEL PASOTISMO MUNICIPAL (III)

En Enero de 2014 los postes siguen en su sitio. La Comunidad de Propietarios hace una campaña de recogida de firmas y envía escrito a la Alcaldesa de alicante, sonia Castedo, con fecha 12 de enero de 2014, adjuntando 11 folios con 132 firmas de personas que prestaron su apoyo a la Comunidad.


sábado, 21 de junio de 2014

CRÓNICA DEL PASOTISMO MUNICIPAL(II)

Los postes siguen en su sitio y el Ayuntamiento de Alicante no responde.
La Comunidad de Propietarios, se dirige a la Asociación de Vecinos del Pla solicitando su intermediación ante el Ayuntamiento para que se proceda a la retirada de los postes
La Asociación de Vecinos se dirige al Ayuntamiento en enero de 2013  a través del EPC que, tras reiterar la solicitud responde  en Febrero de 2013 que " desde las Areas de Urbanismo y Atención Urbana se están llevando a cabo las acciones oportunas para resolver este asunto lo antes posible"
Los postes siguen sin retirarse.




jueves, 19 de junio de 2014

CRONICA DEL PASOTISMO MUNICIPAL (I)

En el año 2004, la Comunidad de Propietarios de C/Gonzalo Mengual,7 recaba información al Ayuntamiento de Alicante  sobre una promoción de viviendas, para cuya construcción se instalan en suelo público, sobre la acera, sendos postes de madera a los que se sujetan las instalaciones que discurren cogidas a la fachada.
Por circunstancias desconocidas, se suspende la promoción de viviendas, pero no se retiran los postes.
Ante el tiempo transcurrido sin actividad, en Mayo de 2012 la Comunidad de Propietarios dirige solicitud al Ayuntamiento para que se retiren del suelo público los postes.


miércoles, 18 de junio de 2014

EL CIRCO





            Seguramente uno de los problemas más graves que pueden sucederle a un circo es “que le crezcan los enanos” .Si resulta, además, que el espectáculo forma parte del conjunto “pan y circo” la cosa se complica y habrá que cambiar las prioridades puesto que, desaparecido el “circo” tan solo queda “pan” lo que, en una situación de crisis no es, tampoco, muy abundante.
            Las posibilidades de que “La Roja” asista, en pleno, a la Coronación de Su Majestad Felipe VI han crecido, a la par que los citados enanos. El “circo” está en la cuerda floja y no sabemos si habrá aplausos o nos devolverán el dinero de la entrada por imposibilidad de finalizar la función.
            Malgastado nuestro patrimonio en unas circunstancias en las que nadie está exento de culpa, aunque haya grados de responsabilidad. ¿Qué nos queda después del estallido de las burbujas inmobiliaria y de las finanzas? Podemos volver la vista atrás y fijarnos en la humanidad, no como conjunto de seres humanos, sino como sentimiento capaz de aproximarnos los unos a los otros, al hacer posible que asumamos los problemas ajenos como propios y ayudemos en su solución.
            Hoy hay una profunda crisis que va más allá de la sanidad, el sistema educativo, la vivienda o los servicios sociales. Hemos pasado de ser un país desarrollado y con cierto grado de independencia a estar esclavizados por el yugo de la macroeconomía, sabiamente administrado por el látigo de quienes, a pesar de haber sido protagonistas del desastre, han sabido hacerse con el mando de la situación. Hábilmente manejan las palabras a modo de esa zanahoria que hace moverse al asno y nos aconsejan que hagamos más agujeros en el cinturón para poder apretarlo un poco más, sin tener cierto cual es el punto en que llegará el ahogamiento.
            Sectores de población y de los partidos políticos vamos despertando y advirtiendo que unos nos han dado las sesiones de “circo” y otros nos contentábamos con asistir, tragando todas las representaciones sin crítica alguna. Hoy caemos en la cuenta de que los payasos que han actuado y pretenden seguir haciéndolo, ya no dan ninguna risa, pues parecen más afanados en mantener a toda costa su privilegiado status que en divertirnos.
            Así las cosas, entre variadas propuestas, las unas descafeinadas y otras vacías de sentido común (¿será cierto eso de que este es el menos común de los sentidos?), en lugar de buscar el lugar común de encuentro y unificar criterios que acaben, al menos, con la tensión generada y generen recursos para ir atendiendo las necesidades surgidas, seguimos cada uno empeñado en diferenciarnos del otro, pendientes más de la forma que del fondo de los problemas.
            ¿Llegará el fin de la necedad colectiva a tiempo para poder acometer la regeneración política y social necesaria para afrontar el futuro con ciertas garantías?