Mientras el PSOE insiste ante el PP, pidiendo un "debate a dos" entre el Sr.Sanchez y el Sr. Rajoy, cosa difícil de aceptar por este último, tras el insulto del primero, no vemos (yo no, al menos) actitudes de ningún partido con propuestas que nos permitan esperar un futuro mejor.
Las utopías, tan deseables de alcanzar, chocan con el muro de la realidad que, entre todos ( sí, entre todos) hemos alentado de una u otra forma. Bien apoyando sin reflexión a nuestro respectivo líder, bien esperando que las cosas se arreglen por sí solas.
Hay que cambiar de mentalidad. No se trata de renunciar a lo bueno. Se trata de que no se debe continuar financiando públicamente cualquier cosa que se ponga a tiro ( un ejemplo bien claro y lamentable lo ofrece la remodelacion de la Plaza de Estella, en Alicante) o esos bodrios de película u obra teatral indigeribles;se trata de que si se es capaz de hacer cola varios días con sus noches, para escuchar al cantante favorito, no se debe poner menos empeño en la formación personal. Se trata de que debemos abandonar la "adicción" a la economía sumergida; se trata de regular y controlar bien las subvenciones; se trata de que es necesario un impulso a la medicina preventiva; se trata de suprimir las listas de espera con demoras inasumibles; se trata de no cerrar los ojos ante lo que sucede cada día...
Los bancos, esas angelicales criaturas que nunca han roto un plato, se confiesan extorsionados por Ausbanc y Manos Limpias, lo que les impulsó a pagarles 39 millones de euros. Qué cosa tenían miedo que saliera a la luz ? Por qué no lo denunciaron en su momento, en lugar de estar durante años pagando ?. Es claro que la extorsión es un delito y debe pagarse, pero... y los bancos ?. Seguramente estaban muy ocupados en desahuciar a quienes no pudieron pagar los préstamos que nunca debieron haberles concedido y en contar el beneficio obtenido.
En Alicante, nuestra ciudad, en el desgobierno del tripartito parece que el único aspecto incuestionable es que ellos cobren a fin de mes. En lo demás hay sus más y sus menos. Por un lado se dice que no hay dinero y por otro no se controla que las subcontratas hagan su trabajo adecuadamente.
Está muy bien hacer política exterior, pero preferible hacerla de España, para que nos conozcan mejor (aunque, a veces, me pregunto si eso nos conviene). Tenemos suficientes problemas internos como para arreglar los de los demás.
Durante mucho tiempo ,se nos prometió "el oro y el moro". Del oro no sabemos nada, aunque intuimos a donde ha ido a parar. Del moro, lo que sabemos es que no lo dejan entrar.