Uno lee o escucha las noticias.No se sorprende ya de nada. Caen los corruptos como fruta ya madura mientras otros ,con placer, sus manos frotan. No pasa nada!
Es la hora del relevo, de los ceses y despidos, de dejar las cosas, no como estaban, sino cada una en su sitio. Es la hora en que los mantenidos por la corrupción y el amiguismo abandonen sus puestos,para ser sustituidos por el trabajo honesto y productivo.
Tomo aquí, como venidos al caso, unos versos del poeta Manuel Molina, extraídos de "El canto insoportable":
"Hora es de que vuelva cada uno
a ocupar su lugar,ni más ni menos,
y suene el yunque y la garlopa afine
el fresco corazón de la madera.
Es necesario que los hombres sepan
que han de volver al tajo de su origen
y empezar la labor cuando la aurora
afile su cristal por las espaldas."
Muchos esperamos que los que vayan a regir nuestros destinos los próximos cuatro años tengan claro que lo que la sociedad quiere es " cambio ".Cosa muy distinta de " cambiazo".
Bastará con que los nuevos(y viejos) políticos apliquen ,desde el primer momento, lo que nos han venido repitiendo: transparencia total, tolerancia cero con la corrupción,creación de puestos de trabajo.
El resto de medidas que tengan en mente es suficiente con que se lleven a cabo con criterios de coherencia y racionalidad, no buscando el aplauso de "la galería", sino el beneficio para toda la sociedad.
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