Ya se sabe que cualquier
acción tiene sus consecuencias. Buenas o malas, todo depende del interés de
quien las haga, de los medios de que disponga, de la oportunidad…
No escapan de esta
dinámica los partidos políticos que, siendo oposición, aspiran a gobernar y,
cuando esto se produce, sufren las consecuencias fatales de un mal gobierno
anterior o disfrutan de sus aciertos y, en ocasiones, hasta se ponen medallas
por ello. Como se suele decir, “esto es lo que hay” y, pasado un
tiempo prudencial, ya no es válido el recurso de echar la culpa al que gobernó anteriormente.
El hecho es que uno, como
ciudadano, tiene la impresión de que sus gobernantes dejan muchas cosas en el
aire y no son, precisamente, expertos en otorgar prioridades al empleo de los
impuestos en las inversiones o gastos de, en este caso, la ciudad de Alicante.
Por ello, se impone un cambio
radical de mentalidad en los ciudadanos, que somos quienes soportamos,
realmente, las consecuencias de las buenas o malas políticas. Hay que llevar a
la práctica el dicho “el ojo del amo engorda al caballo” y,
por supuesto, abandonar la necia idea de “eso es cosa del Ayuntamiento”. El
Ayuntamiento no es un ente ajeno a los ciudadanos; elabora sus presupuestos y
gasta el dinero que recibe de nuestros impuestos. Por tanto, tenemos derecho a saber
en qué se invierte o gasta y, en consecuencia, la obligación de ser críticos, de
manera constructiva, sobre cómo se hace.
Hoy voy a ejemplificar
las consecuencias que tiene para los ciudadanos el que , por parte de
legislaturas anteriores, no haya habido supervisión adecuada de obras públicas.
La lluvia, tan esperada, permite que se aprecien, claramente, cosas mal hechas.
|
Charco en acera C/Dato Iradier (recoge el agua de una bajante) |
|
Macro-charco en C/Pintor Zuloaga |
|
Charco en meseta escalera C/Dr. Sapena |
|
Charco en la otra meseta de escalera C/Dr. Sapena |
|
Charco en acera C/Padre Esplá |
|
Zona mal acabada en imbornal C/Padre Esplá |
|
Charco en acera C/Padre Esplá | | |
|
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario