Las
razones que utiliza la Naturaleza para actuar como lo hace, seguramente tienen
poco que ver con la lógica humana aunque, una vez que ha sucedido la
catástrofe, ya sea corrimiento de tierras, contaminación, riada o cualquier
otra, los expertos encuentran con inusitada rapidez las causas que la
motivaron, lo que nos deja el sabor amargo de la duda ¿si han descubierto con
tal celeridad el problema, no será que lo sabían y estaban callados?
Si
nos ceñimos a la situación actual de España, con lluvias extemporáneas en
algunos sitios y, por lo general, excesivas en todos, comparadas con el régimen
pluviométrico habitual, seguramente las crecidas de los ríos han producido unos
daños cuantiosos, no sólo en lo material, sino también en vidas humanas y en
pérdidas de valor sentimental, que jamás podrán ser recuperadas.
Hace
ya muchos años( los expertos seguro que encontrarán rápidamente las referencias)
que ha habido partidarios y detractores
de los trasvases. Los unos aludiendo razones ecológicas, los otros
basándose en razones (¿?) políticas. Mientras, las aguas, que lo único que
saben es que nos hemos puesto en su camino entubando, desviando, redirigiendo
cauces, o construyendo edificios en ellos, de vez en cuando nos enseñan quien
tiene la fuerza y, por si no lo hemos advertido, también nos dicen que si no
puede ir por su sitio de siempre y buscará un camino alternativo, cueste lo que
cueste. ¡Y vaya si nos cuesta!
Me
pregunto si no sería rentable, en todos los órdenes, social, económico, medioambiental,
etc., establecer una red de trasvases nacional que fuera operativa tan sólo
cuando se produjeran excesos pluviométricos o situaciones reales de necesidad
en determinadas zonas. En ése caso, se activarían las acciones oportunas para
dirigir el agua de manera no agresiva hacia aquéllas otras en donde los
embalses, o los cauces tuvieran capacidad para absorberla.
Puede
que no sea la solución perfecta, pero personalmente creo que es mejor que
permitir el que, año tras año, poblaciones enteras se vean afectadas y haya
pérdidas humanas, simplemente porque nadie adopta iniciativa alguna al respecto.
Mientras
tanto, cada vez son mayores las zonas de cultivo abandonadas, las aguas de
riego no son de la calidad adecuada y hay poblaciones o zonas en situación casi
permanente de sequía.
¡Que
me lo expliquen!
Vaya por delante que, lo que a continuación sigue ni es explicación, ni es solución, es sólo una reflexión.
ResponderEliminarEl ser humano puede, artificialmente, intentar, con un gran coste energético y económico, retener, embalsar el agua para cuando haya escasez y, al mismo tiempo, intentar (no siempre se consigue con este método) que el exceso de lluvias no perjudique.
Existe una solución más natural, ecológica y de infinitamente menor coste energético para retener el agua, y que se vaya dosificando naturalmente: la que proporciona la capa vegetal.
Pero, desafortunadamente, esta es, en numerosas ocasiones, un obstáculo para determinados intereses económicos particulares.
Seguramente si empezamos por el grifo de cada uno, utilizando racionalmente el agua, saldremos ganando, pero para ello hay que "jugar en equipo"
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