DIA QUINTO.-Si soy sincero, he de decir
que me asalta una gran duda. ¿No duermo, o sueño que no duermo? De una u otra
manera, el caso es que a las seis de la mañana estaba mirando el reloj y
preguntándome qué hacía en la cama. Pero ni siquiera el Sol se había despertado
y la oscuridad era total, así que me quedé un poco más remoloneando entre las
sábanas.
Poco a poco, lo de ser “amo de casa” va
saliendo por sí solo, como si toda la vida hubiera estado haciéndolo. A este
paso voy a tener que controlarme porque, si lo hago yo todo, ¿qué hará ella,
cuando vuelva? Pensaré en algo, no sea que , no teniendo ocupaciones, el ocio
la lleve por mal camino.
Hoy ha sido otro día de ésos nada
apacibles. Viento fuerte que empujaba o arrastraba, según la dirección que
tomase y, además, frío intenso. Menos mal que alicante es “la casa de la
primavera”. Afortunadamente estaba invitado a comer por L y M. Han sido platos
de gourmet. Hervido, como merece un día frio y desagradable y bacalao a la vizcaína.
Todo regado con un buen vino. Eso, la agradable compañía y una ligera siesta
para, después volver a casa, a batallar con el “listening” de Inglés, los e-mails
y este diario. He aprovechado el tener conectado el ordenador para dirigir un
correo al Banco, quejándome por haber recibido hoy un escrito de fecha 12 de
diciembre de 2012 anunciando algo que iba a tener lugar el 24 de diciembre,
también de 2012. Es decir, un mes antes de que pudiera decidir si me convenía o
no la propuesta.
He llevado a P el papel que había
recogido en la campaña que, desde la Asociación de Vecinos, venimos haciendo
para ver si es viable el crear algún puesto de trabajo con el reciclado de
papel y cartón.
Ella me ha llamado. Con sus amigas está
disfrutando del viaje y de las atenciones y amabilidad de los chilenos.
Seguimos en nuestra campaña de no dar mucho negocio a los operadores
telefónicos, de manera que nuestras conversaciones duran un par de minutos como
mucho.
No he encontrado ningún programa de
televisión interesante y he ido picoteando aquí y allá, hasta que he decidido irme
a la cama.
Pienso en ella cada día. Buenas noches,
amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario